Cristina Hendricks, que aparece vestida para matar en distintas fiestas de celebridades, desfiles o festivales a beneficio, recibió un ultimatum de los diseñadores: no le prestarán más vestidos para la alfombra roja.
La semana pasada, en la entrega de los premios Emmy, lució un vestido color lila de Zac Posen , pero la actriz de Mad Men, afirma sentirse discriminada por el mundo de la moda.
“La gente dice cosas bonitas y maravillosas sobre mí”, declara la actriz. “Sin embargo, ni un sólo diseñador quiere prestarme un vestido. Sólo prestan tallas 34 o 36. Sigo peleándome por encontrar a alguien que me zurza un traje”, afirma Christina.
Según señala Europa Press, aunque pueda parecer irónico, Hendricks no es la única actriz que confiesa tener problemas a la hora de vestirse para los grandes eventos celebrados en Hollywood. Hace unos meses, la actriz Anne Hathaway también confesó que ruvo que devolver más de un vestido de diseño prestado por no entrar en él.
“Si los diseñadores quieren vestirme tienen que saber que soy de las que usan las tallas más amplias en Hollywood, así que tienen que contar con eso”, explicó la actriz.
Según ella, el problema es que los diseñadores se basan en el cuerpo de una modelo para crear sus propuestas, sin tener en cuenta que no todas las actrices de Hollywood tienen talle 36. “Sólo hay unos pocos que rehacen el vestido para que lo luzcas”, añadió Hathaway.
fuente: lanacion.com
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